Finalmente la Legislatura de Santa Cruz aprobó una ley de expropiación de los bienes de Vieira -seis buques pesqueros de langostino y calamar, más la planta procesadora- con los votos de 20 diputados kirchneristas y la abstención de dos opositores.
El manejo de la entidad ha sido entregado a un sindicato allegado a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU). El caso está en manos de la embajada española en Argentina.
La filial argentina de Vieira posee una planta de factoría en tierra con 150 personas que se ocupan de procesar la pesca como condición para operar en el país. El plantel con los embarcados totaliza 400 empleados según informa el diario argentino Clarín.
La crisis europea ha lastrado el crecimiento de la matriz española y la deuda que había contraído por las exportaciones que le llegaban desde la Patagonia había quedado sin pagar. La deuda era de 60 millones de pesos (9 millones de euros) y fue el detonante para que la filial argentina solicitase en concurso de acreedores con unos números rojos que ascienden a 80 millones de pesos (12 millones de euros), según Clarín.
Cuando iban a designar el grupo encargado para dirigir el concurso de acreedores para que la compañía saliese de esa situación, el gobierno de Santa Cruz decidió expropiar la filial, es decir, quedarse con todos los activos de la empresa (cinco buques dedicados a la pesca de langostinos y dos para el calamar además de la planta procesadora). ntina/1348500258.html">Argentina expropia una pesquera española | Argentina
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